Triunfo de la Revolución: comienzo de una era de cambios
A finales de 1958 el dictador Fulgencio Batista solo se preocupaba por organizar su fuga en secreto, para lo cual ordenó la preparación de tres aviones militares DC 4 y elaboró la lista de los compinches que lo acompañarían, mientras su jefe de prensa divulgaba partes en los que anunciaba que los rebeldes eran derrotados en todo el país, lo cual repitieron hasta el ridículo el propio primero de enero de 1959 los principales medios estadounidenses.
Autor: Jorge Wejebe Cobo