Antonio Maceo, la eternidad desde el combate
La caída en combate del Lugarteniente General Antonio Maceo y Grajales, el 7 de diciembre de 1896, cuando brillaba más su estrella de sobresaliente estratega en la campaña del 95, fue un golpe muy doloroso para las fuerzas patrióticas y libertarias que acometían la extraordinaria invasión de Oriente a Occidente, extensora de la guerra como llamarada por toda la nación, bajo el mando supremo del Generalísimo Máximo Gómez.
Autor: Marta Gómez Ferrals | Foto: Archivo