Matanzas, 11 oct (ACN) Como una experiencia profundamente emotiva describió Mélissa Lavergne, reconocida percusionista de Canadá, su encuentro con Los Muñequitos de Matanzas durante la jornada por el aniversario 73 de la emblemática agrupación y el X de la Academia Folclórica La Rumba Soy Yo.
La visita de la artista respondió a una invitación especial de Los Muñequitos para integrar las actividades del programa conmemorativo que, del 8 al 12 de octubre, reúnen en la ciudad a creadores, investigadores y amantes de la rumba en dinámica celebración.
Su llegada a Matanzas marcó un reencuentro con una cultura que calificó de “viva y cercana”; en su primera estancia en Cuba, hace dos años, como parte de un intercambio entre Canadá y la provincia, participó en acciones artísticas que la acercaron al folclor local y despertaron su deseo de volver.
La percusionista destacó el valor simbólico de Los Muñequitos de Matanzas al afirmar que “quien ama la rumba conoce a esta agrupación, porque su energía y sus armonías vocales representan el alma de Cuba”.
Acompañada por el creador Francis Mercier, de la compañía MOPERC, colaboró en los talleres de restauración de instrumentos tradicionales, y compartió además espacios con la Jazz Band juvenil Swing Cubano dirigida por el maestro Bruno Villalonga.
Lavergne resaltó que Los Muñequitos fungen como emblema de la rumba cubana en América, Europa y Asia; y afirmó que su nombre despertó ecos de identidad, de fuerza y de raíces universales.
Originaria de Quebec, Canadá, Mélissa Lavergne desarrolla una reconocida carrera como intérprete y promotora cultural; formó parte de la orquesta del programa televisivo Belle et Bum y ha trabajado en la enseñanza de la percusión latina, con una trayectoria que enlaza ritmos del Caribe y América del Norte.