La Habana, 9 dic (ACN) El gladiador cubano del estilo grecorromano Ismael Borrero volvió a tocar la gloria mundial este 2019 con su título conquistado en la cita del orbe de lucha que acogió la ciudad de Nur Sultan, Kazajistán, en septiembre último.

Esa corona, que une a la conseguida en Las Vegas, Estados Unidos, en 2015, le permitió a Borrero sumar su segundo oro mundialista y ser seleccionado hoy por primera vez el mejor atleta masculino de Cuba del año.

El gran resultado en el certamen universal lo catapultó para recibir ese premio, que constituye un reconocimiento más que justo por su impresionante actuación en suelo kazajo.

Y es que el santiaguero, campeón olímpico de Río de Janeiro 2016, completó una extraordinaria faena en dicha lid al lograr seis victorias en los 67 kilogramos, para así subir a lo más alto del podio de premiaciones.

En la gran final de su peso, el destacado luchador cubano superó 3-1 al ruso Artem Surkov, quien no pudo repetir su reinado de Budapest 2018, parado en seco por el representante de la nación caribeña.

Unido al cetro de su división, Borrero aseguró su boleto a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, evento al que irá en busca de su segunda presea dorada bajo los cinco aros.

De vuelta a su accionar en Nur Sultan, en su camino a la gloria debutó con éxito de 9-0 por superioridad técnica (ST) ante Hamed Mousa, de Irán.

Después alcanzaría otros dos triunfos por ST y en la fase de cuartos de final tuvo su combate más cerrado al aventajar 3-1 a Hansu Ryu, de Corea del Sur; mientras en una de las semifinales derrotó 6-2 a Mohamed Ibrahim Elsayed, de Egipto.

Así transitó su camino al oro el gladiador de la llamada tierra caliente, Santiago de Cuba, quien otra vez le dio la razón a su entrenador Raúl Trujillo, que en reiteradas ocasiones lo ha calificado como un luchador excepcional, y así precisamente lució en los Juegos Panamericanos de Lima.

En la capital peruana, el pasado mes de agosto, Borrero se desquitó de lo sucedido en Toronto 2015 y conquistó el metal áureo de manera inobjetable, para engrosar su palmarés personal y validar aún más su elección como el mejor deportista cubano del actual año.