Cienfuegos, 13 ago (ACN) Hablar de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) en Cienfuegos es referirse a una fuerza poderosa que ha tejido, hilo a hilo, los avances de la igualdad y el desarrollo social en la provincia, durante estos 65 años de creada la organización.
No es casual que el territorio fuera sede del acto nacional hace dos años y reconocido como provincia destacada, porque detrás de cada resultado hay nombres, rostros y manos femeninas que no se detienen.
Ana Ivis Gómez Hernández, secretaria general de la FMC en el territorio cienfueguero lo explica con la certeza de quien ha visto nacer y crecer esos procesos.
“Los logros de hoy descansan sobre la constancia de mujeres que, en cada consejo popular, han demostrado que el cambio no se sueña: se construye.”
Y entonces recuerda, casi como quien abre un álbum familiar, a líderes comunitarias que han dejado huella: la trabajadora social quien formó a jóvenes que hoy son profesionales; a la primera mujer en laborar en el puerto y aún recorre la ciudad en su bicicleta para atender a su gente.
En Paraíso, Reina, Junco Sur o el Centro Histórico, otras federadas se volcaron por entero durante la pandemia, para asegurar alimentos y atención a las personas más vulnerables.
“Cada una es un capítulo de una historia colectiva que no se escribe en oficinas, sino en calles, fincas y hogares”, asegura Gómez Hernández.
El empoderamiento femenino en Cienfuegos también se mide en el surco, y un ejemplo vivo de cómo la organización visibiliza y respalda a mujeres en la producción lo constituye Virgen Vera Reyes, campesina destacada, con labor reconocida con varios premios.
Hoy la fuerza femenina está representada en más del 90 por ciento de integración en la FMC y el 46 por ciento en el gobierno provincial.
Años atrás pocas dirigentes contaban con formación universitaria, no obstante, ahora abundan licenciadas y másteres en diversas áreas, con una preparación idónea para liderar esferas de la salud, educación, administración y hasta en sectores tradicionalmente masculinos como la agricultura y la construcción.
Además de impulsar la producción, la FMC ha desarrollado espacios para orientar y proteger mediante las casas de orientación a la mujer y la familia, y los programas contra la violencia de género, incluso una reciente donación permitirá abrir un centro integral para atender a víctimas de violencia, un paso más en la meta de garantizar derechos y seguridad.
Ese espíritu combativo de las cienfuegueras puede encontrarse en muchas luchadoras y combatientes, entre estas aquellas que conformaron el Batallón Femenino de las Milicias Nacionales Revolucionarias en Cienfuegos, en apoyo a las tareas de defensa, logística y labores sanitarias durante la invasión mercenaria a Playa Girón, y posterior derrota del imperialismo yanqui en América Latina.
A las federadas cienfuegueras se le puede considerar como una comunidad en movimiento, con memoria, futuro, y mujeres que -desde la tierra o la tribuna, desde el aula o la casa- escriben la historia con sus propias manos.