Desde su llegada a las Series Nacionales con los Alazanes, de Granma, el pelotero cubano Alfredo Despaigne sobresale por su poder ofensivo, la frecuencia y dimensiones de sus batazos, y su disciplina dentro y fuera del terreno.
La campaña número 44 vio surgir a un novato con ansias de brillar entre los grandes, algo que logró con creces desde entonces hasta la recién concluida 53 Serie, en un periplo que incluye marca de más jonrones (36) para una temporada regular.
Pero, sin proponérselo, Despaigne logró un récord poco conocido o divulgado que nada tiene que ver con el madero, sino con el uniforme.
Y es que el joven- oriundo del municipio santiaguero de Contramaestre- integró nada menos que ¡siete! Equipos diferentes desde la Serie 52 a la 53, una cota nada despreciable para los curiosos.
Resulta que Despaigne comenzó la edición 52 con sus Alazanes granmenses, quienes no avanzaron a la segunda fase del torneo. El toletero formó parte entonces como refuerzo de Pinar del Río para la etapa conclusiva de la lid.
En medio de esa justa, como es tradicional, se celebró en Cuba el Juego de las Estrellas, al cual se integró Despaigne con el Orientales, su tercer conjunto.
La misma campaña tuvo un alto en el camino para que los mejores peloteros cubanos insertados en el campeonato doméstico integraran el team Cuba al III Clásico Mundial y Despaigne vistió entonces su cuarta franela como toletero.
Al concluir la temporada 2012-2013, el atleta cubano cambió de uniforme y partió rumbo a México para integrarse a los Piratas de Campeche, de la Liga Mexicana, su quinto equipo entonces.
Iniciada la Serie Nacional 53 en la Isla, a finales del año pasado, Despaigne vuelve con sus Alazanes, quienes una vez más quedan en el camino y el codiciado refuerzo se une a las Avispas, de Santiago de Cuba, para la segunda fase, su sexto elenco en poco más de un año.
Y su séptimo y nuevo uniforme lo vistió a principios del actual 2014, cuando representó a Villa Clara en la Serie del Caribe en Isla Margarita, otra vez como refuerzo.
Nada, que el recio bateador granmense, además de su reconocido poder con el madero, ya posee una extensa colección de uniformes con diferentes emblemas.