Santa Clara, 20 nov (ACN) La Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) Gregorio Pedroso, ubicada en el municipio villaclareño de Encrucijada, consolida la aplicación de técnicas agroecológicas que garantizan la generación estable de alimentos y benefician a las comunidades.
Elio Olivera Martínez, presidente de la entidad, declaró a la Agencia Cubana de Noticias que en sus cerca de 50 hectáreas dedicadas a cultivos varios y 20 a la cría animal, han logrado rendimientos que permiten cumplir los planes previstos y realizar donaciones sistemáticas a centros asistenciales de la zona.
Precisó que en el último quinquenio el inventario porcino multiplicó más de 450 ejemplares de cerdo criollo y 300 carneros, destinados tanto a la reproducción como a la venta directa a la población de la zona.
"Es importante el aporte social de las demás cooperativas de la provincia, no solo a la casa de los abuelos, sino a otras instituciones donde existen personas vulnerables", afirmó Olivera Martínez al referirse al programa de ayuda que incluye entregas de granos, yuca, plátanos y boniatos.
Recientemente construyeron un complejo experimental para la multiplicación de variedades de plátano y yuca destinadas a la alimentación animal, complementando el uso de excedentes agrícolas y abonos orgánicos derivados de la crianza porcina.
Evelio Rodríguez de Armas, labriego de la localidad, señaló que a pesar de las dificultades con el combustible, la escasez de pienso y las trabas bancarias, mantienen prácticas innovadoras que fortalecen la resiliencia agrícola y aseguran alimentos saludables.
Entre las prácticas resilientes adoptadas destacan el empleo de tracción animal en las labores del campo, la aplicación de biofertilizantes y bioestimulantes foliares de origen nacional, y la utilización de paneles solares como fuente energética renovable.
La entidad, portadora de la Condición de Vanguardia Nacional, ha extendido su ayuda alimentaria a comunidades como Perucho Figueredo, Dos Amigos y Calabazar de Sagua, donde residentes como María de los Ángeles Luaces Martínez reconocen el valor de estas contribuciones solidarias.
Como muestra reciente de su compromiso social, los trabajadores de la UBPC donaron 114 libras de arroz al Hogar de Ancianos Haydée Santamaría, reforzando el principio de solidaridad que caracteriza al campesinado cubano.
La experiencia de esta unidad demuestra cómo la combinación de métodos agroecológicos con un profundo sentido comunitario puede generar impactos positivos tanto en la producción de alimentos como en el bienestar de la población más vulnerable.
