Guantánamo, 2 Sep (ACN) Con un sentido homenaje póstumo, la provincia de Guantánamo se sumó al duelo que recorre a Cuba por el fallecimiento del doctor Eduardo Torres Cuevas, director de la Oficina del Programa Martiano y presidente de la Sociedad Cultural José Martí, SCJM, ocurrido en la madrugada del pasado 31 de agosto.
La ceremonia, realizada en la plaza Mariana Grajales, de la ciudad capital, reunió a Yoel Pérez García, primer secretario del Partido Comunista de Cuba en el territorio, junto a representantes de las instituciones de Cultura, el gobierno, pioneros y jóvenes de clubes martianos.
El afecto se materializó en simbólicos gladiolos frente a su imagen y la firma de un libro de condolencias, gestos que perpetuaron el profundo respeto y agradecimiento de un pueblo.
La doctora Noralis Palomo Díaz, presidenta de la SCJM en la provincia, destacó a la Agencia Cubana de Noticias la imperiosa necesidad de rendir este homenaje a “toda su obra colosal."
Torres Cuevas fue un eminente cubano muy auténtico, consagró su vida al magisterio, la investigación, la difusión y la defensa de la historia de Cuba, con una trayectoria que desde muy joven en la campaña de alfabetización, estuvo guiada por una cosmovisión martiana y fidelista que defendió en la arena nacional e internacional la causa de nuestra nación, la ideología de la Revolución cubana y los valores de esta, enfatizó.
Acotó Palomo Díaz que la prolífica obra de Torres Cuevas, como doctor en ciencias históricas, profesor titular, desde la Casa de Altos Estudios Don Fernando Ortiz de la Universidad de La Habana, desarrolló una labor que enriqueció de manera imperecedera la historiografía nacional y universal.
Además, este eminente intelectual, cuenta con un amplio legado como director de la Biblioteca Nacional José Martí durante una década, presidente de la Academia de la Historia de Cuba, diputado a la Asamblea Nacional, y hace siete años asumió la dirección del Programa Martiano y la presidencia de la Sociedad Cultural José Martí.
Subrayó que este homenaje era indispensable para el pueblo guantanamero, por la significación para Torres Cuevas de esta tierra, por la cual José Martí transitó durante 19 días luego de su desembarco por Playitas de Cajobabo, el 11 de abril de 1895, y recordó, conmovida, que durante su última visita en 2023, el historiador instó a potenciar el trabajo con las nuevas generaciones, “porque ahí está el futuro”.
A nosotros nos queda, como martianos y cubanos, seguir defendiendo ese legado, con apego a su obra y a su ejemplar vida, él también fue un ejemplo de conducta, sin tacha, con apego y con coherencia a los principios y a la moral de la Revolución cubana, expresó.
Por lo tanto, deviene desde ya un referente no solo para especialistas e intelectuales, sino para todos los cubanos auténticos; es motivo de inspiración, pero también de compromiso, de darle continuidad y no dejar morir este proyecto de todos, concluyó y enfatizó en que Torres Cuevas fue un defensor consecuente de que la alternativa de Cuba está, justamente, dentro de su Revolución.