La Habana, 14 dic (ACN) Como un archivo estable que preserva y difunde el patrimonio fílmico, la Cinemateca de Cuba celebra 65 años, homenajeada por el 46 Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano.
Seis de febrero de 1960. Esta fecha marca la fundación de la primera institución encargada de preservar el patrimonio fílmico nacional, un año después de crearse el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (Icaic), refiere Juventud Rebelde.
Antes de ella, el Cine Club de La Habana exhibió clásicos del cine, obtenidos por la Cinemateca Francesa y por el Departamento de Cine del Museo de Arte Moderno de Nueva York, pero realmente no se encuentran títulos del cine cubano producidos en esos años, conservados con toda intención.
Miembro de la Federación Internacional de Archivos Fílmicos y de la Coordinadora Latinoamericana de Archivos de Imágenes en Movimiento, son 65 años los que celebra la Cinemateca de nuestro país, dentro de la cual surgió el cine móvil, porque la intención primigenia fue que fungiera como un museo ambulante del cine.
Ambos homenajeados merecidamente en la 46 edición del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, subraya el diario de la juventud cubana.
Héctor García Mesa, Reynaldo González Zamora, Enrique Ubieta Gómez, Manuel Herrera y Luciano Castillo han sido sus directores en distintas etapas, fervientes defensores de conservar el patrimonio cinematográfico cubano y de otras latitudes para su utilización con exclusivos fines de estudio, investigación, educativos y para su exhibición cultural y no comercial.
Rescatar cuanto se pudiera siempre fue el objetivo principal de la Cinemateca de Cuba. Documentales, obras de ficción, noticieros… todo aquello que reflejara la historia, las costumbres y acontecimientos trascendentales de nuestro país fue cuidadosamente archivado porque, sin duda, es un preciado material que sirve de testigo de nuestra vida.
Este fue enriqueciéndose con el paso del tiempo con colecciones privadas y de distribuidoras y productoras fílmicas, compras y donaciones de producciones extranjeras y copias de nuestras propias obras.
