La Habana, 20 jun (ACN) Para el doctor Ángel Delgado Álvarez la Pediatría enfrenta el reto diario de no conocer cómo se sienten los pacientes pequeños, por eso hay que estudiar mucho, actualizar los conocimientos y saber de antemano signos y síntomas que pueden ser reveladores.
Con más de cuatro décadas de experiencia en el Hospital Pediátrico Centro Habana, el especialista expresó a la ACN que la paciencia y ternura son requisitos indispensables en esta rama, pues hay que tratar también con la familia.
Muchas veces toca reducir la angustia y la desesperación de los seres queridos del infante, y saber escucharlos, porque ellos pueden apuntar informaciones muy necesarias para el diagnóstico.
Destacó la formación integral durante su etapa en la carrera de Medicina, con la inspiración y ejemplo de excelentes médicos y profesores como, por ejemplo, los doctores Raúl Riverón, Eladio Blanco Rabasa, Santiago Valdés Martín y, en especial, de Sonia Oliver López, a quien agradece su vínculo con el mundo de la Neuropediatría.
En el constante camino de la superación, Delgado Álvarez también se especializó en el ámbito de la gastroenterología pediátrica.
A pesar de que día a día enfrenta casos complejos, dijo que ningún pediatra piensa en la muerte, sino en la sonrisa del infante, en la gratitud de la familia, en salvar esa vida.
El reconocimiento en la calle, la visita siempre de bienvenida, todo eso demuestra la confianza del pueblo en los profesionales cubanos, a pesar de las carencias del sistema de salud pública agravadas por el recrudecimiento de las medidas coecirtivas unilaterales de Estados Unidos a Cuba.