La Habana, 29 oct (ACN) Santiago de Cuba vive una situación meteorológica crítica debido a intensas lluvias que comenzaron alrededor de las 2:00 a.m. y se han mantenido constantes hasta la medianoche.
Beatriz Johnson Urrutia, presidenta del Consejo de Defensa Provincial (CDP), informó vía telefónica a la revista especial del Canal Cubano de Noticias que nunca antes se había registrado un nivel de precipitaciones tan elevado en tan corto tiempo, tanto en la ciudad como en el resto de la provincia.
Las intensas lluvias en Santiago de Cuba han dejado acumulaciones de 98 mm en la Gran Piedra y 116 mm en Los Reynaldos, provocando el aumento del caudal del río Guaninicúm. Se reportan inundaciones en varias zonas de la ciudad cabecera, incluyendo Mar Verde, la fábrica de aceite, la avenida de las Américas y el litoral portuario, comentó.
Precisó que la situación en el poblado de El Cobre ha sido especialmente delicada. Durante la noche, se realizaron tres evacuaciones debido al crecimiento del río.
El puesto de mando tuvo que ser reubicado en un segundo piso para garantizar la seguridad del personal. Además, se reportó un deslizamiento de tierra en la Loma del Cimarrón, donde 17 personas —incluidos dos niños y cuatro adultos mayores— quedaron atrapadas. Un equipo de rescate se dirige al lugar, bordeando el río crecido para alcanzar a los afectados, refirió.
Apuntó que las autoridades provinciales, junto a los presidentes de los consejos de defensa municipales, el secretario del comité municipal del Partido en Guamá y el vicegobernador, se encuentran en las zonas más afectadas.
En Chivirico, se reportan fuertes vientos y lluvias intensas. Se han activado brigadas de rescate y salvamento, y se aplican medidas de emergencia para enfrentar el fenómeno, que ha sido asociado al huracán Melissa, afirmó.
Señaló que la Defensa Civil y el Centro Meteorológico Provincial continúan evaluando la situación, que será clave para la revisión de los planes de respuesta ante desastres. Según Johnson Urrutia, este evento podría ser uno de los más graves registrados en la historia reciente de Santiago de Cuba y posiblemente del país.
