La Habana, 23 feb (ACN) Bruno Rodríguez Parrilla, ministro de Relaciones Exteriores, rechazó hoy la permanencia de una base naval estadounidense en la provincia de Guantánamo, contra la voluntad de los cubanos.
El Canciller indicó en la red social X que los 117 kilómetros cuadrados que aún ocupa ese emplazamiento militar fueron usurpados por Estados Unidos el 23 de febrero de 1903, cuando impuso un Convenio para las Estaciones Carboneras y Navales.
Asimismo, subrayó que en la basa naval de la bahía de Guantánamo, el Gobierno del país norteño ha torturado impunemente y viola sistemáticamente los derechos humanos de sus prisioneros.
En la misma red social, el Ministerio de Relaciones Exteriores señaló que Cuba rechaza la presencia militar estadounidense y demanda que se devuelva ese territorio ilegalmente ocupado.
La base fue resultado del mencionado un Convenio, firmado Washington y La Habana, en circunstancias en que el Gobierno cubano no poseía prácticamente independencia, por la imposición de la Enmienda Platt (1901).
Con un área de 117,6 kilómetros cuadrados del territorio nacional de Cuba, la instalación comenzó sus operaciones en diciembre de 1903.
Luego del triunfo de la Revolución (1959) el enclave se convirtió en una plataforma de permanente agresión al país, mediante el apoyo a organizaciones contrarrevolucionarias y redes de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), que recibían de allí todo el soporte material necesario.
A partir de 2002 se estableció un centro de detención para presos acusados de terrorismo, que en 2003 ya albergaba a 700 reclusos, la mayoría detenidos en Afganistán durante la invasión estadounidense.