Nueva Gerona, 14 may (ACN) Situado en la confluencia de la calle 20 y el boulevard José Martí, en la ciudad cabecera de Isla de la Juventud, el parque 15 de Mayo atesora una página indeleble de la historia que trasciende su carácter local.
Lo que hoy es un apacible lugar, en la segunda década del siglo XX, vio erigirse en este mismo sitio el Hotel Isla de Pinos. Modesta edificación de madera, de dos pisos, diseñada con el estilo característico de los bungalows, donde residían muchos norteamericanos, quienes, atraídos por la belleza y tranquilidad del lugar, se establecieron en la que es actualmente Isla de la Juventud.
Sin embargo, fue el 15 de mayo de 1955 cuando este hotel entró definitivamente en los anales de la historia cubana. Ese día, gracias a la presión popular, fueron excarcelados del infame Presidio Modelo los jóvenes revolucionarios liderados por Fidel Castro, quienes habían sido condenados a largas penas de prisión por su participación en el asalto a los cuarteles Guillermo Moncada, en Santiago de Cuba, y Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo.
Alrededor de las tres de la tarde, en el lobby del Hotel Isla de Pinos, Fidel Castro, acompañado por varios de sus compañeros de lucha, ofreció una conferencia de prensa donde reafirmó su determinación de continuar la lucha contra el régimen imperante en Cuba.
Durante este encuentro, entregó a los periodistas presentes una copia del “Manifiesto al pueblo de Cuba”, en el que proclamó: “Nuestra libertad no será de fiesta o descanso, sino de lucha y deber; de batallar sin tregua desde el primer día, con un quehacer ardoroso por una patria sin despotismo ni miseria, cuyo mejor destino nada ni nadie podrá cambiar”.
Esa misma noche, los revolucionarios excarcelados, junto a su líder, abordaron el buque “El Pinero”, entonaron las notas del Himno Nacional y de la Marcha del 26 de Julio, suceso que marcó un hito en la historia del país.
El Hotel Isla de Pinos fue demolido en 1967, y solo permanece en pie el depósito de agua de la desaparecida hospedería, un testigo silente de los acontecimientos que allí tuvieron lugar.
Hoy, el Parque 15 de Mayo invita a la tranquilidad y al descanso, pero también se convierte en un punto de encuentro cultural cuando se celebran eventos.
Este espacio guarda bajo su aura de quietud una fecha singular que trasciende los límites de la historia local, un recordatorio del valor y la lucha por la libertad que marcaron un antes y un después en Cuba.