Bayamo, 31 dic (ACN) La joven cubana Lidia Ruth Machado Hechevarría siente tanto amor por la institución donde se formó como educadora, en esta ciudad oriental, que al graduarse continuó en ella, pero ahora con las responsabilidades de una profesional.
Egresada en 2019 de la especialidad de maestra de Inglés para la Educación Primaria, calificó de maravilloso e inolvidable su tránsito de cuatro años como alumna de la escuela pedagógica Rubén Bravo Álvarez, de la capital de la provincia de Granma.
Fue un trayecto de aventuras, emociones y experiencias vividas junto a compañeros, todos los cuales disfrutamos de saberes impartidos por magníficos profesores.
Confesó que pasar de ocupar un pupitre a impartir clases a un grupo de estudiantes jóvenes, como ella, la impresionó; pero superó ese momento y hoy se siente a gusto en el rol de pedagoga.
Enseñar conlleva una gran responsabilidad, pues vas a dejar impregnado en cada alumno un pedacito de ti, y hay que hacerlo de la mejor forma posible, subrayó Machado Hechevarría.
Todo en la vida tiene una repercusión, dijo, y no hay nada más lindo que depender de uno mismo, cumplir un sueño y llegar a ser lo anhelado.
En Lidia Ruth, la vocación por el magisterio es como una suerte de herencia "genética" de línea materna, porque su mamá, amiga y confidente, Kenia Hechevarría Suárez, ejerce igualmente el magisterio en el seminternado Rubén Noguera, también en Bayamo.
Tras graduarse, la joven docente de solo 23 años de edad cursó la Licenciatura en Inglés, y actualmente prepara su trabajo en opción a la categoría científica de Máster en Ciencias de la Investigación.
Afirmó que asume el nuevo empeño con responsabilidad y entusiasmo, y dará lo mejor de sí para lograr el éxito.
Reír con facilidad resalta entre las características de la entrevistada, y asegura hacerlo porque es feliz, gusta de su trabajo y de compartir con los amigos; un selecto grupo en el cual están, sin duda, sus alumnos, agregó.