Claudia María Delgado Torres | Foto: Autora
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15 Marzo 2024

La Habana, 15 mar (ACN) Luego de tres jornadas de intercambio de experiencias y actualización de conocimientos  relacionados con la enfermedad renal crónica (ERC)  en Cuba y América Latina, concluyó hoy el XI Congreso Nacional de Nefrología 2024, efectuado del 13 al 15 de marzo en el Hotel Nacional, de esta ciudad. 

    La agenda científica del evento estuvo conformada por 32 conferencias, tres simposios dedicados al impacto del proyecto de cooperación de la Agencia Francesa para el Desarrollo, la diálisis peritoneal  y el avance de la enfermedad renal, con una prevalencia en el 10 por ciento de la población, alrededor de 65 millones de personas con esta condición en el continente latinoamericano.  

  A su vez se desarrolló una sesión de temas libres sobre la enfermería nefrológica  y se presentaron 59 posters sobre riesgo cardiovascular, nuevos tratamientos renoprotectores, hemodiálisis y trasplantes. 

   En las palabras de clausura, la Dra Yamilé García Villar,  directora  del Instituto Nacional de Nefrología, manifestó que la cita fortaleció alianzas y  saberes para enfrentar  los padecimientos renales  desde la prevención, pues la prioridad es evitar  o disminuir el riesgo de la necesidad de una diálisis o un trasplante en los pacientes. 

  Ante el envejecimiento de la población cubana y la persistencia de los factores de riesgos como la hipertensión, obesidad y diabetes, los estudios divulgados en este foro  apuntan hacia un crecimiento de las ERC en el país, aseveró la especialista. 

   García Villar exhortò a fomentar la ciencia y la innovación para mejorar la calidad de vida de los enfermos y robustecer   las colaboraciones  con otras  especialidades para una mayor   atención médica, sobre todo en el nivel primario. 

  Jorge Pérez Oliva, presidente de la Sociedad de Nefrología en Cuba, expresó a la ACN el orgullo que siente  por quienes trabajan esta rama de la Medicina, con el amor y compromiso de optimar la salud de las personas. 

   En tiempos difíciles como la pandemia Covid-19, se mantuvieron la vitalidad de  servicios de hemodiálisis y de trasplante renal y  los nefrólogos estuvieron inmersos en todas las etapas de desarrollo y protocolo de tratamientos y  en las investigaciones sobre el virus, dijo. 

    Los pacientes crónicos sospechosos se trasladaron a centros hospitalarios con condiciones para continuar su procedimiento y también a los que fueron positivos se les garantizó este método sustitutivo de la función renal, ponderó Pérez Oliva. 

   Significó la obtención hace 25 años por la biotecnología cubana de la eritropoyetina humana recombinante, un fármaco fundamental para la calidad de vida de los pacientes con fallos renales, pues da una sensación física de bienestar y aumenta la hemoglobina. 

   Previo a la  magna cita se realizaron seis cursos sobre la Bioética, Nefro-urología, Enfermedad Renal Diabética, Atención Primaria de Salud, Nefrointervencionismo y Pediatría.