Aúnan esfuerzos para la atención a fallos cardíacos (+Fotos)

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ACN - Cuba
Claudia María Delgado Torres
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11 Julio 2025

La Habana, 11 jul (ACN) Ante la elevada prevalencia de pacientes con insuficiencia cardíaca en Cuba y a nivel global, expertos y personal de salud aúnan esfuerzos para su prevención, control y manejo integral de esta afección. 

  Juan Prohías Martínez, jefe del Grupo Nacional de Cardiología,  expresó a la ACN  la implementación de varios protocolos de investigación  orientados a los factores de riesgos que la producen como la obesidad, la diabetes y  la hipertensión, pues el fallo cardíaco no es más que el estadio final a consecuencia de ellos. 

  Explicó que dentro de esta alta cifras incide también el envejecimiento poblacional en el país, las enfermedades renales y la cardiopatía isquémica. 

  Muchas de estas patologías  pueden ser prevenidas o tratadas manteniendo un estilo de vida saludable,  evitar los hábitos tóxicos como el tabaco, el consumo de otras sustancias que podrían ser cardiolesivas,  y realizar ejercicio físico con regularidad, dijo. 

  Prohías Martínez refirió que la Organización Panamericana de la  Salud y el sistema sanitario cubano unen fuerzas en esta batalla mediante el proyecto Hearts, que impulsa iniciativas para mejorar la práctica clínica, la prevención y  la asistencia a personas con   enfermedades cardiovasculares, con énfasis en la atención primaria de Salud . 

   Señaló que la nación caribeña cuenta con medios de diagnóstico como la ecocardiografía y se introducen los biomarcadores cardíacos, tecnología aplicada a pruebas  de sangre  que permite un pronóstico mas certero.

    Para fortalecer alianzas se desarrolló los días 10 y 11 de julio el Primer Congreso Nacional de Insuficiencia Cardíaca, espacio que posibilitó  socializar experiencias y novedosas propuestas para perfeccionar los modos de  actuación. 

    Especialistas nacionales e internacionales coincidieron en la importancia de un temprano diagnóstico y  tratamiento de esos padecimientos, lo cual reduce los índices de morbilidad y mortalidad por fallos cardíacos.

   Hacia este primer paso se adoptaron estrategias para intensificar la interacción del médico y la enfermera de la familia con los pacientes y el estudio de la incidencia de los factores de riesgos.