Nueva Gerona, 17 oct (ACN) Con un ambiente cargado de entusiasmo, reflexión y compromiso, la III Convención Internacional IslaCiencia 2025 cerró oficialmente sus puertas hoy en esta ciudad y deja tras de sí un legado de ideas compartidas, colaboraciones incipientes y una visión renovada del futuro.
En el acto de clausura, Araime Berrio Méndez, vicerrectora de desarrollo de la Universidad de Isla de la Juventud, agradeció a ponentes, estudiantes, comité organizador y voluntariado por hacer posible una logística impecable y una experiencia inolvidable.
Significó que durante varios días, expertos nacionales e internacionales abordaron los avances más recientes en áreas clave como la inteligencia artificial, la salud, la gestión turística, el desarrollo local y la sostenibilidad ambiental.
La cita se convirtió en un espacio de intercambio fecundo, donde la ciencia no solo se discutió, sino que se vivió como motor de transformación social, afirmó.
Señaló que esta convención concluye no solo con más conocimiento, sino con un valioso ecosistema de ideas, alianzas consolidadas y una misión renovada; sin embargo, lo verdaderamente trascendental apenas comienza: la revolución científica; es momento de transformar la calidad en acción, redactar propuestas, emprender experimentos colaborativos y desafiar el status quo.
Con un balance “abrumadoramente positivo” dijo, IslaCiencia 2025 cumplió su propósito de sembrar la semilla de la ciencia en cada participante; Berrio Méndez concluyó su intervención convocando oficialmente a la IV Convención Científica y de la Ciencia, que se celebrará en mayo de 2027.
Ya anfitriones y participantes cuentan los días para el reencuentro, porque si algo dejó claro esta edición, es que la ciencia evoluciona, conecta y transforma.
Al cierre del evento, el Parque de los Hexágonos de la ciudad acogió una feria de oportunidades, donde actores económicos —tanto públicos como privados—, junto a estudiantes, exhibieron su potencial de desarrollo e innovación.