Desde 1989 el Crucero por la Paz visitó a Cuba en 19 ocasiones hasta que en junio de 2019 la ONG Peace Boat, con base en Japón, lamentaba la imposibilidad de atracar en puerto habanero por nuevas restricciones del bloqueo de Estados Unidos contra la isla, lo que expresó en nota entregada en La Habana al Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (Icap).
Así era atacada esta corriente de amor y solidaridad que ha llevado a más de un centenar de países el mensaje de paz, justicia social y por la preservación del medio ambiente.
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El líder histórico de la Revolución Fidel Castro recibió a hibakushas (sobrevivientes de los ataques nucleares de EE.UU. en Hiroshima y Nagasaki) y pasajeros que viajaban en la nave en 2010 y 2012. En ese último encuentro, ante más de 600 participantes, aseveraba:
“Los problemas actuales del mundo son una cuestión de la supervivencia de la especie. No es concebible en el mundo la paz con armas nucleares. Es una batalla que estamos obligados a ganar, hay que educar a las masas sobre la realidad de la vida…
En Hiroshima y Nagasaki fue intencional el lanzamiento de las bombas atómicas, en Chernóbil ocurrió un accidente y si se sigue hurgando se van a conocer los efectos de los ensayos nucleares…”
Las visitas del Crucero por la Paz las coordinó con esmero el Icap, institución que asumió la representación del país en el Consejo Mundial de la Paz (CMP), al ser la coordinadora de la organización para las Américas y el Caribe.
En Cuba, se organizan Seminarios Internacionales por la Paz y la abolición de Bases Militares Extranjeras que tiene por sede a la provincia de Guantánamo, donde se encuentra una ilegal base naval estadounidense, que permanece en territorio cubano en contra de la voluntad del pueblo.
Los participantes en las sesiones repudian ese enclave naval, al igual que las bases militares extranjeras en todos los territorios, porque violan la soberanía y amenazan la paz.
El Instituto y el movimiento de solidaridad Internacional con Cuba vuelcan su fuerza en respaldo a las causas justas, a las aspiraciones y derechos de los pueblos, por la paz internacional.
Han realizado acciones de condena a los sionistas y su genocida política de exterminio del pueblo palestino y al despliegue militar naval de Estados Unidos en el Caribe; en defensa de América Latina y el Caribe como zona de Paz y de firme respaldo a la Revolución Bolivariana de Venezuela, a los independentistas puertorriqueños y al pueblo saharaui.
Fomenta la Isla una paz digna en la que se respete el derecho inalienable de los pueblos a su independencia, soberanía y autodeterminación, y que implica el apoyo a procesos y movimientos que luchan por esas aspiraciones.