Los cubanos dieron en la capital panameña el salto cualitativo esperado gracias a los nuevos conceptos aplicados en la preparación de sus deportistas, la ayuda gubernamental y la política de convertir al deporte en derecho de todos los ciudadanos, así refiere en su texto Los Juegos Regionales Más Antiguos el ya fallecido cronista deportivo Enrique Montesinos.
Para Cuba los XI Juegos Centroamericanos y del Caribe efectuados en Ciudad de Panamá (1970) se tradujeron en la materialización de todo un sistema implementado desde el mismo triunfo de la Revolución, el primero de enero de 1959, que abogó por la práctica sana de ejercicios físicos y la concepción del deporte como derecho del pueblo, sin discriminaciones ni privilegios de unos sobre otros.
La delegación de la mayor de las Antillas ya había participado en la cita precedente (San Juan 1966) bajo los "efectos" de los procesos económicos, políticos y sociales puestos en marcha desde que un nuevo gobierno tomara las riendas de la nación, para implementar la sentencia martiana de que sería "con todos y para el bien de todos".
En tierra boricua el deporte revolucionario dio muestras de sus potencialidades al alcanzar el segundo escaño en la tabla de posiciones por países- a solo tres metales dorados de diferencia con México-, pese a los disímiles intentos de Estados Unidos por impedir la presencia de los criollos en esa cita.
El evento convocado en la urbe istmeña tendría en la ínsula a su monarca, nación que de los 16 deportes convocados únicamente no se impuso en clavados, natación, voleibol femenino, ciclismo y baloncesto rama masculina.
Esa justa por primera vez reportó la participación de más de dos mil atletas (dos mil 095), en representación de 20 países, al sumarse Surinam y Belice.
Tras totalizar 98 preseas doradas, los cubanos superaron en 60 a México- segundo lugar- y conquistaron 61 platas y 51 bronces; en tanto lograron la mayor cantidad de medallas áureas hasta ese momento, pues anteriormente había ocurrido en Caracas 1959 donde los mexicanos se agenciaron 53 títulos, en un certamen con más deportes en competencia (17) y menor cantidad de delegaciones asistentes (12).
De la mano del atletismo llegó la cosecha superior, con 27 oros, 17 platas y 19 bronces; mientras que Miguelina Cobián reeditó la actuación de su connacional Rafael Fortún (1946, 1950 y 1954) al coronarse por tercera oportunidad en línea en los 100 metros planos.
También logró los títulos en los 200 y el relevo 4x100, y su coterráneo Pablo Montes consiguió igual resultado (100, 200 y 4x100).
Asimismo, las féminas se impusieron en el podio en 100 metros, 200, 400, 100 con vallas, saltos largo y alto, bala y disco; toda vez que los hombres lograron los tres puestos en 200, salto triple y bala.
Descolló además, la gimnasia, pues tanto hombres como mujeres consiguieron 14 metales dorados, 12 plateados y similar cifra de bronceados.
Jorge Rodríguez obtuvo seis títulos (final individual, barra fija, manos libres, arzones, caballo de salto y por equipos) y una plata en anillas; y Miriam Villacián fue dueña de cuatro coronas (final individual, caballo de salto, barras asimétricas y por equipos) y bronce en manos libres.
Otras buenas noticias corrieron a cargo del levantamiento de pesas- que además del biatlón, único apartado tenido en cuenta antes de esa versión de los Juegos, premió por ocasión inicial el envión y la fuerza-, con Abel López (división de los 75 kilogramos) y Fernando Bernal (más de 110) como principales figuras al colgarse cuatro títulos.
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Béisbol, baloncesto (f), boxeo, fútbol, lucha, judo, esgrima, tiro deportivo, voleibol (m) y polo acuático (m) también fueron dominados por los cubanos; ese último deporte guiado por el entrenador húngaro Karoly Laky, que alcanzó ocho éxitos consecutivos.
En definitiva, la cita celebrada en Ciudad de Panamá significó el inicio de una fila de nueve éxitos en línea en esa lid regional, sin tener en consideración los eventos de San Salvador (2002) y Mayagüez (2010), a los cuales la mayor de las Antillas no asistió por problemas de seguridad para sus atletas.