La Habana, 13 sep (ACN) Con un codo maltrecho que lo obligó a tomarse un descanso durante todo el 2025, además de una grandeza deportiva que supera sus dos metros de estatura, Ryan Crouser lanzó la bala como solo él sabe hacer para alejar las dudas en el Campeonato Mundial de Atletismo, con sede en Tokio, Japón, y consumar así su tercer cetro del orbe con un disparo de 22,34 metros (m).
El estadounidense, ajeno a su óptima forma, pero con la convicción de mantener un reinado que incluye tres oros en citas olímpicas, tan solo necesitó dos intentos para liderar la prueba hasta denotar las diferencias en un último lanzamiento y llevar el implemento más allá de los 22 m en el Estadio Nacional de la capital nipona.
A pesar de las dificultades, a pocos sorprendió el éxito del máster en finanzas de la Universidad de Texas, pues a lo largo de su carrera ha plantado la idea de siempre tener un margen de mejora, en una dimensión donde compite contra sí o el límite planetario, el cual también lleva su nombre (23,56 m).
El mexicano Uziel Muñoz, quien con un envío de 21,97 m se adueñó de la medalla de plata y el récord nacional, validó los buenos registros en el año y desde el puesto número 12 del ranking brindó emociones a un evento que del tercer peldaño, en poder del italiano Leonardo Fabbri, en lo adelante dispuso de mayor combatividad.
Con similar distancia a la de Fabbri, pero con un menor segundo alcance, el neozelandés Tom Walsh quedó relegado a la cuarta plaza, por más que ofreció su principal actuación en la actual contienda.
Al término de la primera jornada la delegación de Estados Unidos marcha el frente del medallero con par de preseas doradas – Ryan Crouser en la impulsión de la bala y el relevo mixto de 4x400 m- mientras Canadá, España y Kenya también inauguraron la casilla de los títulos.