Santiago de Cuba, 3 ago (ACN) Marcos Belén Pileta regresó a su tierra natal tras abandonar el pacto firmado en enero del presente año con los Guardianes de Cleveland y buscará representar a las Avispas en la LXIV Serie Nacional de Béisbol.
Tras la rúbrica, el indómito participó en 27 partidos de la Liga de Verano de la República Dominicana, en la que promedió para solo .176, con 16 hits en 91 turnos al bate; como extrabases conectó tres dobles, impulsó 10 carreras, anotó 14, se robó 12 bases, se ponchó 24 veces y recibió 26 bases por bolas.
Es un poco incómodo, no es tu mismo país, el cambio es muy drástico porque hay más velocidad y cuando llegas te exigen muchas cosas, es chocante hasta que te acostumbras, pero fue una etapa de mucho aprendizaje y crecimiento para mí, declaró el pelotero a la Agencia Cubana de Noticias.
Yo tomé la decisión de terminar mi carrera profesional, pues existieron muchas incongruencias entre quienes me representaban y la organización, que no fueron transparentes conmigo, y a esto se sumó una enfermedad de mi madre, reveló.
Belén Pileta, de 18 años, es un deportista con excelentes condiciones y su capacidad para jugar en el cuadro y los jardines lo ubican como uno de los principales talentos actuales del béisbol cubano.
El profesor Eddy Cajigal me recibió con los brazos abiertos en sus entrenamientos, por suerte, todos los documentos están en regla, así que solo resta entregarme y mostrar mi talento para obtener un puesto entre los 40 para la próxima temporada, destacó.
Primeramente, quiero integrar el equipo Santiago, ayudar a la conquista del campeonato y cumplir el sueño de jugar junto a mi abuelo, para luego vestir el traje de las cuatro letras, que es una de mis metas desde que empecé en este deporte, señaló.
Mi pretensión es jugar béisbol, que es lo que me gusta, concluyó.
