Las Tunas, 4 de nov (ACN) Por muy compleja que sea la realidad para algunos, luego del azote del huracán Melissa y las inundaciones dejadas a su paso, “si nos damos las manos” entre cubanos el desastre puede ser más llevadero; en tanto, el impulso para seguir adelante nace con los disímiles gestos de solidaridad, provenientes de cualquier coordenada en el archipiélago, sin barrera alguna y con el único propósito de servir a los más necesitados.
Dispuestos a ofrecer apoyo emocional a través del arte y el atractivo de la caravana, además del rugir de las motos, el club Caballeros por la vía compartió con los evacuados en la escuela pedagógica Rita Longa, en las afueras de la ciudad de Las Tunas, en la que también realizaron un donativo.
Junto a los motoristas otros actores económicos y afiliaciones religiosas aportan la calidez humana para superar la rudeza de perderlo todo en cuestión de unas jornadas, de aferrarse a la resiliencia para reconstruir lo material, pero en esta ocasión como dueños de más vida dentro de su alma.
Los sentimientos están a flor de piel, nadie queda ajeno al dolor de los afectados y observar estas muestras de cariño dignifican a nuestro pueblo, sobre todo a los tuneros que han recibido a los granmenses con el empeño de amenizar el mal rato por el que atraviesan, declaró Yordan León Rodríguez, director de Cultura en Granma, en exclusiva a la Agencia Cubana de Noticias.
Para León Rodríguez, quien acompaña a sus coterráneos en la institución educativa del Balcón de Oriente, la delicadeza en las historias que acompañan a cada una de las familias le brotan las lágrimas y en la garganta habita un nudo de emociones, así como la incertidumbre de qué encontrar a la hora de volver, por ello una bocanada de aire desde la cultura remedia parte de los amargos recuerdos de aquello que el agua cubrió.
Es muy triste vivir una situación así; sin embargo, ante las adversidades toca crecerse y estamos aquí para eso, para servirles de sostén, además de declarar las motos en función de necesidades que existan, estamos prestos a ayudar de muchas formas y sin importar el horario, declaró Marcial Flores, presidente del club.
A las comunidades del municipio de Río Cauto las baña la desolación del barro, pero cuando el caudal permita regresar a los pobladores estos la pintarán con un corazón herido que encontró en el peor contexto el afecto y la empatía de los tuneros.