La Habana, 1 feb (AIN) Con el fallecimiento anoche de un estudiante de 20 años, suman 236 los muertos por el incendio en una discoteca de Santa Maria, en el estado brasileño de Rio Grande do Sul.

Matheus Rafael Raschen estaba internado en estado grave en el Hospital de Pronto-Socorro de Porto Alegre, la capital estadual, según destacó este viernes un vocero del ministerio de Salud, citado por la agencia de noticias Prensa Latina (PL).

Familiares de Raschen señalaron que el muchacho estaba afuera de la discoteca Kiss cuando comenzó el fuego, pero decidió entrar para ayudar a salir a algunos de sus compañeros, y quedó atrapado en el local por el humo y las llamas.

Este deceso ocurrió poco después de que este jueves fueron dados de alta 11 lesionados, quienes estaban ingresados desde el domingo último, día del siniestro, por lo cual la cifra de internados descendió a 126 personas.

De ese total, 70 siguen en estado crítico, tienen ventilación mecánica y corren riesgo de morir, según último reporte de la secretaria de la Gobernación.

El incendio, considerado como la peor tragedia de los últimos 50 años registrada en el país, se generó por el uso de una bengala durante un concierto de la banda Gurizada Fandangueira en una fiesta universitaria en el centro nocturno.

De acuerdo con un despacho cablegráfico de EFE, el fuego se propagó rápidamente por la espuma usada en el aislamiento acústico del techo, que también generó un gas tóxico responsable de la mayoría de las muertes, según las primeras investigaciones.

La Policía cree que el número de asistentes superaba el aforo de la discoteca, que era de 691 personas, y también investiga otros factores que pueden haber contribuido a la tragedia como la ausencia de una puerta de emergencia o la falta de suficientes extintores.