La Habana, 4 jul (ACN) El Instituto Nacional de Ciencias Agrícolas (INCA), ubicado en el municipio mayabaquense de San José de las Lajas, es líder en el país en el mejoramiento genético de plantas ornamentales, lo que contribuye a la protección de los ecosistemas cubanos.
Lorenzo Suárez Guerra, jefe de su Departamento de Genética y Mejoramiento de las plantas, en un encuentro con la prensa explicó que los híbridos creados allí son muy llamativos, atraen a las personas y, por tanto, ellas dejan de ir a los hábitats naturales a extraer las especies endémicas.
De esta manera el mejoramiento genético de plantas ornamentales contribuye a preservar la flora nacional; incluso actualmente la Sociedad Botánica Cubana, en la sección de orquideología, prohíbe que en sus exposiciones se presenten especies silvestres, y se ha ido fomentando el uso de híbridos, refirió el especialista.
En Cuba se ha trabajado más en lo referente a las plantas que proporcionan alimentos, debido a la fuerte demanda de la población; sin embargo, en cuanto a las especies ornamentales, la última vez que entraron diversidades al país fue en la década del 80 del pasado siglo al crearse los jardines botánicos, aseguró.
La Isla contaba con pocas investigaciones sobre el mejoramiento genético de las plantas ornamentales; por ello desde 2002 el INCA ha comenzado a desarrollar esta línea, con énfasis en el cruzamiento de orquídeas, declaró Suárez Guerra.
Gracias al trabajo de este investigador en 2009 se logró registrar en la mayor de las Antillas, Bella Lorena, el primer híbrido de orquídea, le siguieron, mediante la técnica de retro cruces, otros individuos del género Spathoglottis.
Resultaron entonces el denominado Celia Sánchez, en homenaje a la heroína cubana, cuyos primeros ejemplares se llevaron a un mausoleo ubicado en San Antonio de los Baños, también surgieron Ecos de Festivales, y el último, logrado en 2018 de nombre Haydée, señaló.
A diferencia de otras orquídeas, que para lograr una hoja, el proceso se demora alrededor de un año, estos híbridos son terrestres, y se multiplican muy fácil por división de planta, características que los hacen más atrayentes para los coleccionistas, comunicó el investigador.
Lorenzo Suárez Guerra recalcó que si bien las plantas se logran a nivel de laboratorio son los productores élites, vinculados al INCA, quienes se encargan de su cultivo con el asesoramiento de los investigadores.
Cerca de 15 híbridos cubanos se han registrado en la Sociedad Hortícola de Inglaterra, donde consta que el cruzamiento de esas especies es creación del INCA; algunos de ellos también están reconocidos en el Libro de Registro de Variedades del Ministerio de la Agricultura.
El Instituto Nacional de Ciencias Agrícolas arribará próximamente a sus 50 años de fundado; y concentra sus investigaciones en cuatro líneas principales: mejoramiento genético de las plantas, biofertilizantes y nutrición, ecofisiología vegetal y productos bioactivos y manejo de agroecosistemas sostenibles, todas en función de mejoras para la producción.