Se va despidiendo la etapa estival -no así las altas temperaturas- cuando ya es inminente el reinicio de las actividades escolares el primer lunes de septiembre.
En los centros educacionales y en las casas ya el tema es más recurrente en la medida de la cercanía de la fecha. Es hora pronto de volver a las aulas para los estudiantes y profesores.
A pesar de los muchos inconvenientes, aun así los niños, adolescentes, jóvenes y el resto de la familia accedieron a opciones para el recreo.
El buen humor y las sonrisas no faltaron aunque el contexto resultase retador por usar uno de los tantos adjetivos con el cual se podría resumir la suma de barreras que enfrenta Cuba, perseguida durante más de seis decenios por el criminal bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos, ahora con más vueltas de rosca a cargo de Donald Trump, en su segundo mandato en la Casa Blanca.
La falta de alimentos, transporte, combustible, el gas licuado para cocinar, los medicamentos, la inflación, el déficit de divisas para operar con normalidad y los apagones -aunque ya está en marcha la transición energética- no impidieron que los meses de ocio trajesen disímiles propuestas para aprovechar el tiempo libre.
Disfrute de playas y el campismo en contacto con la naturaleza, pasadías y estancias en los diferentes polos vacacionales y la cultura en todo su esplendor tomó las calles, plazas y anfiteatros. La literatura se hizo presente a su vez con varias presentaciones de obras.
El cine inundó con sus pantallas móviles las comunidades, como sucedió en el barrio del Mónaco, municipio de 10 de Octubre, y otra vez el séptimo arte atrajo la atención al salirse de sus tradicionales salas oscuras.
Por supuesto, el deporte también tuvo su espacio. El ejercicio al aire libre, los maratones y juegos de mesa acapararon audiencias. Y no solo eso, sino también estuvo representado por las transmisiones radiales y televisivas de los II Juegos Panamericanos Junior de Asunción 2025, donde la delegación antillana lucha por defender el pabellón patrio desde la arrancada hasta el final de la cuatrienal cita, ahora en Paraguay.
Hubo eventos que descollaron por su atractivo como la Feria de la Cultura Cubana Arte en la Rampa, Pa’Cuba, en Pabexpo; el Primer Festival de los Deportes del Mar y Playa, en los Círculos Sociales del oeste y los balnearios de Bacuranao y Guanabo, al este, y el Lucasnómetro de Verano, el día 22 del mes en curso, en el teatro Karl Marx.
También el programa cultural Rutas y Andares celebró sus 25 años, los últimos cinco ya sin la presencia física del Doctor Eusebio Leal Spengler.
El pasado 13 de agosto en Birán (Holguín) se celebraron los 99 años del natalicio del Comandante en Jefe Fidel Castro y se lanzó la convocatoria para el advenimiento de su Centenario, justo dentro de 365 días, una efeméride de resonancia nacional e internacional. Bajo la convocatoria de 100 años con Fidel, se realizarán un sinnúmero de iniciativas y encuentros de relevancia, como el venidero Congreso del Partido Comunista de Cuba, en abril de 2026.
Todas las iniciativas implementadas para que los meses de verano tuvieran ofertas para los integrantes de la familia cubana significaron un esfuerzo extra, a causa del retador contexto autóctono.
Pero el afán por paliar las calamidades se traduce en decisiones tan bien recibidas como el aumento de las pensiones de menor cuantía, con lo que se beneficiaron más de un millón 300 mil 500 personas, quienes a partir del 20 de agosto ya cobran tales incrementos.
Ello trascendió en julio en el más reciente periodo de sesiones del Parlamento, en el cual dentro de una amplia agenda se analizó con énfasis, las razones de la tendencia a la contracción económica persistente en el primer semestre.
Con respecto al año 2019, Cuba no ha logrado recuperar sus niveles productivos y de servicios. Ello constituye un reflejo del panorama difícil del país desde entonces, sin embargo, la nación sigue en movimiento y de ello dan fe algunas de las decisiones mencionadas.
Tiempos son estos de fuegos cruzados cuando Cuba continuó buscando alternativas, no se detuvo, no se amilanó y contó con el apoyo mayoritario de la población como en batallas previas. En aquellos y en estos afanes de hoy día, se fueron encontrando soluciones para el presente y el futuro.
No vivimos en una burbuja de cristal ni mucho menos nuestro diario bregar es una panacea, mas a pesar de los pesares, de la inamovible política imperial y la desleal guerra mediática de las redes sociales con sus “fake news”, la nación busca alternativas para preservar su sistema social.
Conforme hubo propuestas para el verano para cargar las pilas, igual ya hay que enfocarse para alistar los centros escolares y el material docente dado lo inminente del periodo lectivo, en difíciles circunstancias. Pero de qué va, va.
Hay que respirar y aspirar, renovar las esperanzas y fijarse metas, porque ante tal cúmulo de adversidades solo existe una disyuntiva para los revolucionarios cubanos: ¡Crecernos siempre!