Andy Cruz, “el matador” de Alacranes

Compartir

John Vila Acosta| ACN FOTO/ Roberto MOREJÓN RODRÍGUEZ
1281
24 Noviembre 2015

Cuando alguien observa las fotografías del boxeador cubano Andy Cruz en la red social Facebook pudiera pensar que se trata de un chico más, al cual le gusta salir y compartir junto a los amigos, bailar y tomarse algún que otro trago para relajar.  ACN FOTO/ Roberto MOREJÓN RODRÍGUEZ

La Habana, 24 nov (ACN) Cuando alguien observa las fotografías del boxeador cubano Andy Cruz en la red social Facebook pudiera pensar que se trata de un chico más, al cual le gusta salir y compartir junto a los amigos, bailar y tomarse algún que otro trago para relajar.

Pero sucede que “el matador”, seudónimo con el cual se identifica en muchas de las instantáneas,  es ejemplo de entrega al deporte de los puños desde que comenzó a golpear anatomías hace ya más de una década en el poblado de Alacranes, perteneciente al municipio matancero de Unión de Reyes.

De niño no me perdía un combate que transmitieran por la televisión, junto a mi papá Pedro Cruz pasé horas con la mirada fija en cada puñetazo, en cada esquiva y cada movimiento de piernas, supe entonces que pelear sobre el ring era lo mío, confiesa Cruz.  

Por aquellos días Andy practicaba con Gustavo Delgado, quien fuera su primer entrenador en una senda por la que también transitaron otros como Liván Blanco, Yosvani Blanco y Franklin Aldama, quienes- al decir del alumno- aportaron un granito de arena en su formación como atleta.

Cruz, quien ahora se prepara bajo la tutela de Juan Hernández Sierra, recuerda con agrado su participación en el Campeonato Mundial Juvenil de Armenia en 2011, al cual llegó tras titularse en el torneo nacional de la categoría menores de 18 años.

El primer púgil campeón en los Juegos Panamericanos de Toronto asegura que la derrota en el mundial de Doha, Qatar,  lo agarró por sorpresa. Sus entrenadores en la esquina no lo incitaron nunca a forzar la pelea porque ellos también esperaban un veredicto favorable al criollo, pero no fue así.

La derrota siempre duele, máxime cuando muchos de mis compañeros avanzaron en el organigrama y yo me conformé con solo una victoria en el certamen, más de todo se sale y me queda el sabor dulce de que Cuba volvió a dominar el medallero por naciones después de 10 años, refiere.

Ahora el veinteañero representante de la división de 56 kilogramos perfila sus jabs, swings y ganchos para intervenir en el Torneo Nacional Playa Girón, en diciembre próximo, y sobre todo para aspirar a integrar la nómina cubana a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.

En tierra carioca, el también estudiante de la Licenciatura en Cultura Física tendrá el difícil reto de cumplir una vieja promesa hecha a su madre Vivian Gómez, quien asegura que Andy es boxeador porque le fascina pelear y si fuese por ella nunca se hubiese envuelto en "piñasera" alguna.

Durante el torneo boxístico de las Olimpiadas de Londres 2012,  Andy Cruz disfrutó junto a su progenitora la victoria del joven Robeisy Ramírez, quien se tituló con solo 18 años bajo los cinco aros.

Su madre lloró de emoción y Andy, quien entonces contaba 15 primaveras,  saltó de alegría y dijo “yo también seré campeón olímpico”, por tanto, saldar la deuda está al alcance del unionense, si persiste en la idea de imponerse en la llamada Ciudad Maravillosa.