Sancti Spíritus, 17 feb (ACN) Las bondades del arte y la cultura para sanar el alma y sumar motivaciones y actitudes en adolescentes con determinadas situaciones de conducta son los motores inspiradores de Amor y Esperanza, proyecto gestado desde la Biblioteca Provincial Rubén Martínez Villena, de esta ciudad.
Con medio año de creada y matizada por la pedagogía y la experimentación práctica, la iniciativa acerca a los niños y adolescentes del Centro Especializado en Servicios Educacionales (CESE) a todas las aristas del arte para que, desde una amplia variedad de actividades, puedan enriquecer su espiritualidad y forjar un mejor presente y futuro.
Belkis Marisol Rodríguez González, directora de la "Rubén Martínez Villena", puntualizó a la Agencia Cubana de Noticias que el objetivo es lograr todos los meses un intercambio de los integrantes del proyecto con escritores, músicos, artistas escénicos y de la plástica para nutrir a las nuevas generaciones de conocimientos y animarles la sensibilidad.
También pretendemos que se interrelacionen con la fotografía y sus creadores y que logren adentrarse en el quehacer de las instituciones culturales, un mundo que prácticamente no conocían, según hemos constatado en este periodo de trabajo, acotó la especialista.
Como parte del encuentro más reciente en el taller del escultor y ceramista Félix Madrigal, los niños y adolescentes acariciaron el barro, lo moldearon y dibujaron sobre piezas conformadas por ellos mismos, experiencia que pidieron repetir en futuros intercambios.
Para el escritor Marcos Antonio Calderón y para Maipú Villavicencio, subdirectora de la biblioteca provincial, el éxito del proyecto se va constatando poco a poco en la afinidad que sus integrantes van logrando con cada descubrimiento del entorno artístico; incluso, ya esperan con ansias ese día, precisaron.
Mientras, la propia Belkis Marisol Rodríguez González puntualizó que, aun cuando es muy poco tiempo de trabajo, la conducta y la actitud de los niños y adolescentes ha cambiado y sus intereses se van centrando cada vez más en aquellas actividades, momentos y escenarios que alimentan su espiritualidad.