La Habana, 15 jul (ACN) La colaboración entre micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) y la Empresa Estatal Prodal se consolida como un modelo productivo que aporta empleo, desarrollo local y beneficios sociales en Cuba.
Este encadenamiento, que articula recursos, capacidades y mercados, enfrenta retos técnicos pero avanza con resultados positivos para las comunidades, mediante contratos de producción cooperada, en el cual existe una compensación entre ambas partes.
Jesús González Arce, presidente de la Mipyme Zona Turbo SRL, destacó, en entrevista exclusiva a la Agencia Cubana de Noticias, que su empresa ubicada en la zona de Puentes Grandes se enfoca en generar empleo para el barrio, produciendo principalmente productos cárnicos como hamburguesas, albóndigas y picadillos.
Resaltó que Prodal aporta maquinaria, capital humano y reconocimiento de marcas, factores que favorecen la producción y el empleo.
Señaló también que pese a las dificultades como problemas eléctricos y de maquinaria, es importante el encadenamiento por su impacto social y productivo, y subrayó el apoyo comunitario con donaciones a los Sistema de Atención a Familias y escuelas.
Enrique Fabelo Menéndez, representante de la Mipyme Variedades Corzo, explicó asimismo que elaboran productos como chorizo, salchichas, jamón y mortadella y destacó que el encadenamiento ha sido clave para mantener viva la empresa y sostener empleos, y de este modo venden mensualmente cerca de 20 toneladas mensuales.
La empresa aporta casi todas las materias primas y ofrece precios bajos, atendiendo sectores vulnerables y realizando donaciones en situaciones de desastre, como fue el caso de los sismos en la provincia de Guantánamo.
Osmany Pérez Leyva, director general de la Suministros Roma, relató que fueron de las primeras entidades en integrarse al encadenamiento con Prodal, a través del pago que se realiza mediante un sistema de compensación que puede ser por pago en efectivo o intercambiando por maquilas de productos.
Destaca, así, la aportación estatal en recursos energéticos y capital humano, pues "Roma" cuenta con puntos de venta en Habana Vieja y El Cotorro, con ventas diarias en torno a 40 toneladas, que son posible gracias al encadenamiento productivo que se realiza con la empresa estatal para la comercialización de elaboraciones a partir del pollo y cerdo.
De este modo puntualizó que su responsabilidad social incluye apoyo a hogares de niños sin amparo familiar y hospitales.
Acralis Afonso Hernández, directora de la empresa Prodal, explicó que la práctica del encadenamiento productivo se inició en 2020 para suplir la falta de materias primas importadas.
Comentó que actualmente trabajan con 19 empresas del sector no estatal, y 13 más dedicadas al mantenimiento y suministro de piezas para maquinaria, aunque la crisis energética y la escasez de piezas afectan la producción, las Mipymes colaboran para resolver problemas.
"Existen contratos formales que garantizan producción y pagos mediante compensación, con planificación mensual y cooperación entre empresas estatales y Mipymes para mantener la operatividad", dijo Alfonso Hernández.
Para este sistema de encadenamiento productivo entre empresas estatales y otras formas de gestión es necesario reflejar un modelo de colaboración que potencia la producción local, genera empleo y cumple objetivos sociales, pese a los retos técnicos y logísticos que enfrentan conjuntamente.
La experiencia de Prodal y sus socios demuestra la importancia de articular capacidades y recursos para fortalecer la economía cubana y atender a la población con productos asequibles y de calidad.