Las Tunas, 10 nov (ACN) El montaje de dos electrobombas en la planta potabilizadora que tributa agua hacia esta ciudad, ha originado que la población comentara hoy, entre vecinos, la llegada con suficiente presión del imprescindible líquido a distintos lugares de la capital provincial de Las Tunas.
Sitios de topografía elevada donde comúnmente no llega el agua , ya comienzan a recibir el beneficio, tras largos períodos de inestabilidad en el servicio, lo cual ha tenido su origen en el deterioro de los equipos de bombeo, que ya comienzan a sustituirse por los nuevos que llegaron en octubre último.
Piedad Herrera Núñez, directora de la Unidad Empresarial de Base (UEB) Acueducto Las Tunas, en exclusiva a la Agencia Cubana de Noticias, significó que durante un recorrido realizado en esta jornada por distintas locaciones de la urbe pudo comprobar el nivel de satisfacción de la población, incluso en lugares altos y edificios multifamiliares.
Qué bueno que ya está llegando el agua, comentó una vecina a la otra en la calle José Licea, del reparto Aguilera, afectada habitualmente porque esa vía está enclavada, precisamente, en la cresta de una elevación.
De las 10 nuevas electrobombas llegadas desde el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH), dos están activas, tres fueron instaladas y se acometerá el montaje de las cinco que faltan, precisó Herrera Núñez.
La obsolescencia de la tecnología que garantizaba, y continúa garantizando en parte, el suministro de agua a Las Tunas, imposibilitaba responder a las necesidades de este servicio en diferentes puntos de la ciudad, lo que ocasionaba molestia a la población afectada y la adopción de medidas por la UEB.
De ahí que la entidad movilizó pipas para llevar el líquido hacia varios lugares, pero sin cubrirr todas las necesidades, por razones obvias: las limitaciones con el combustible que afecta a la economía y los servicios en Cuba.
Antes de la llegada de los huracanes Oscar y Rafael al archipiélago cubano, los embalses administrados por el INRH en la provincia estaban al 53 por ciento de su capacidad de llenado, pero estos eventos hidrometeorológicos solamente hicieron que los niveles subieran al 54 por ciento.