La Habana, 11 abr (ACN) El coraje, convicción ideológica y fortaleza de los diplomáticos que representan al pueblo de Cuba por el mundo fueron reconocidos hoy, a 23 años del golpe de Estado en Venezuela, cuando fue asediada la Embajada cubana en Caracas por los extremistas de la derecha.
Vivían J. Alvarado, cónsul de la República Bolivariana de Venezuela en la mayor de las Antillas, recordó que el 11 de abril del año 2002 los golpistas apresaron al presidente Hugo Chávez y desataron una ola de agresiones fascistas, asediaron a la embajada de Cuba, le cortaron los servicios básicos y trataron de penetrar, violando todos los preceptos internacionales, a la sede diplomática.
La acción ejemplar en defensa de la soberanía del territorio nacional, de su pueblo, se ha convertido para muchos de los diplomáticos venezolanos en un ejemplo, y por estos días siempre recordamos y agradecemos, porque dignifican los pensamientos de los líderes Fidel Castro y Hugo Chávez, dijo la Cónsul.
En presencia de Orlando Maneiro Gaspar, embajador de la nación suramericana en La Habana, e invitados de varios sectores sociales de Cuba y Venezuela, Rafael Hidalgo, quien fuera consejero político de la Embajada cubana en aquel momento, detalló la génesis del golpe de Estado, apoyado por Estados Unidos, que trató de desaparecer a Chávez.
Wilmar Castro Soteldo, político y militar venezolano, destacó en aquellos meses la ofensiva contra las fuerzas armadas, que bajo el gobierno de Chávez se involucraron activamente con la comunidad, llevando a cabo tareas como limpieza y distribución de alimentos.
Recordó que Chávez buscó romper con la tradición de los militares en los cuarteles y promovió su integración con el pueblo a través del Plan Bolívar 2000, y a pesar de enfrentar desafíos, el Gobierno logró un respaldo significativo de la población.
El militar afirmó que en apenas tres años de la Revolución Bolivariana se habían logrado varias cosas, el pueblo estaba consciente de que el texto constitutivo que nacía le otorgaba derechos, y fue protagonista para frenar la avalancha de violencia que desataron los golpistas.