Guantánamo, 12 dic (ACN) Con 34 semanas de embarazo y a la espera de una niña, Aimara Ramírez Azahares, de 17 años de edad, descansa en una cama del nuevo hogar materno del municipio de Yateras, un logro de este 2025 que alivia a las embarazadas y sus familias con el traslado que debían realizar hacia la capital provincial.
Para esta joven de Palenquito, una zona rural de difícil acceso, el hogar significa tranquilidad y seguridad y así lo expresa "estoy aquí para culminar feliz mi embarazo", afirma, y valora la atención constante y la posibilidad de que sus familiares la visiten sin hacer largos viajes.
A pocos metros comparte esa sensación de alivio Esmailin Cobas Piñón (20 años), quien ingresa por una cervicitis con un tratamiento de siete días, y refiere que allí "atienden muy bien", y que "son muy preocupados".
Ambas son ejemplos del propósito fundamental de esta instalación ubicada en el Consejo Popular Palenque de Yateras, en la circunscripción 30: ofrecer un espacio de cuidado y observación especializada a gestantes de todas las comunidades de allí, incluidas las más intrincadas del municipio guantanamero.
La doctora Yaniuska de la Torrez Frómeta, especialista en Medicina General Integral y certificada en Obstetricia y Ginecología, muestra con orgullo las dos naves que componen el hogar, inaugurado el pasado 13 de agosto, en conmemoración del natalicio del comandante en jefe Fidel Castro Ruz.
Mientras, con una emoción palpable, explica que antes solo era una sala de hospitalización de Obstetricia y ahora dio un gran salto cualitativo, con capacidad para diez camas, baños, sala con televisión, cocina, comedor y seis cubículos, diseñado para llenar un vacío histórico en la atención primaria a embarazadas de la montaña.
El perfil de las pacientes es específico y responde a las realidades del territorio, ella destaca a adolescentes que se ingresan a partir de las 26 semanas por protocolo de ruralidad y las mujeres de 34 semanas que por vigilancia deben permanecer allí hasta su traslado al hospital provincial para la atención secundaria.
Además de las gestantes con bajo peso con condiciones socioeconómicas deficientes y, sobre todo, mujeres de comunidades rurales apartadas como San Rafael, Arroyo del Medio o Bernardo.
"El gran logro es la detección y actuación temprana, con una estadía mínima de siete días, el personal médico y de enfermería realiza un seguimiento integral, se identifican problemas que pueden pasar desapercibidos en consulta externa y permite tratar complicaciones a tiempo o decidir un traslado oportuno", destaca la doctora.
Un pilar fundamental es la alimentación especializada con seis frecuencias al día, con dietas personalizadas: hiperproteicas para quienes necesitan ganar peso e hiposódicas para gestantes con sobrepeso, régimen nutricional posible, en gran medida, gracias a un sistema de apoyo comunitario, según señaló.
Donaciones semanales de formas productivas estatales, trabajadores por cuenta propia y mipymes locales llegan al hogar, con habichuelas, viandas, plátano, pollo e incluso productos como helado o galletas que complementan la dieta y la alegría de ellas.
"Algunas pacientes nos dicen que en sus casas no pueden acceder a esto, tratamos de que el ambiente sea familiar, le brindamos confianza, atención y comunicación, aquí se sienten cuidadas en todos los sentidos", comenta la doctora con tranquilidad.
Es la misma satisfacción no solo para ellas sino para los familiares y la población en general, antes las que tenían patologías las enviaban a Manuel Tames o a la cabecera provincial, ahora, este hogar de tránsito, tiene todo su personal certificado y permite estabilizarlas y monitorearlas localmente, acortar distancias y reducir riesgos.
Así lo corroboró el doctor Reudelkis Azahares Mautel, director municipal de Salud, quien añadió que "el objetivo es que cada embarazo culmine de manera feliz, sin contratiempos y en eso trabajamos diariamente."
Esta obra se inscribe en los esfuerzos por fortalecer el Programa Materno Infantil, en un territorio de 14 mil 997 habitantes (distribuidos en dos áreas de salud) que actualmemte reporta una tasa de mortalidad infantil de 6.7 y proyecta cerrar el año en 5.7, por debajo de la media provincial (6.5).
Más allá de la maternidad, el municipio muestra indicadores sanitarios alentadores, puesto que junto a Maisí, es de los únicos en Guantánamo sin focos de dengue, zika, chikungunya y oropouche que circula por el país, gracias al sistema de vigilancia epidemiológica diario y coordinado con las instancias locales.
A eso se suma que ya el sistema se encuentra a un 90 por ciento de recuperación tras el paso del huracán Melissa el 29 de octubre pasado, con afectaciones en las cubiertas ligeras de los consultorios en San Rafael, Palenque Arriba, San José, ya recuperados, aunque quedan zonas como Virginia Pecuario y otros pocos cuya reparación total se prevé antes del 25 de diciembre próximo, para mejorar los 30 consultorios de atención del médico de la familia en el territorio.
En ese escenario, en el municipio de Yateras se fortalece el sistema de salud de forma integral, para que florezcan lugares como el hogar materno, un centro que más que una instalación médica, es símbolo de protección para la vida que nace en las montañas orientales de Cuba.