Para Inés María Montano Padrón formar parte del claustro de profesores de Educación Física de la Enseñanza Especial en Ciego de Ávila representa un privilegio, y a la vez un compromiso con quienes reciben sus conocimientos y con que el proceso docente educativo sea de excelencia.
Mary, como todos la nombran en su natal municipio de Majagua, lleva 31 años de experiencia en Educación y de ellos más de una década en el colectivo de la escuela especial Capitán San Luis, del Consejo Popular Guayacanes, en la localidad.
El quehacer de esta mujer sobresale, no solo en el centro educacional en que labora, sino también en la comunidad, donde realiza competencias de baloncesto, voleibol y gimnasia aerobia, como una manera de extender su trabajo fuera del centro escolar.
Disfruto lo que le enseño a mis alumnos, pero también con los vecinos de la escuela, pues como viven en un área rural no cuentan con grandes instalaciones deportivas y convocarlos a esos eventos hace bien a la salud y los mantiene vinculados a la institución educacional, afirma esta avileña.
Inés María se privilegia de ser una persona muy comunicativa, don que le ha permitido llegar muy lejos con sus estudiantes en diferentes actividades.
Los educandos de este nivel de enseñanza tienen sus limitaciones intelectuales, pero está comprobado que pueden desarrollar otras habilidades desde la práctica del ejercicio físico y eso los prepara para la vida en sentido general, comenta.
"A través de la educación física, bien orientada, he logrado que ellos mejoren las relaciones interpersonales y de grupo, su postura y el caminar".
La Educación Física en la Educación Especial está orientada a proporcionar a los alumnos elementos y satisfacciones motrices en relación con sus necesidades, intereses y capacidades que puedan ser manifestados durante su participación en los diferentes ámbitos de la vida familiar, social y productiva, asevera Inés María.
Entre los logros de la actividad de Mary con sus muchachos, como ella los llama, están el primer lugar y premio súper especial en la lid provincial de composiciones gimnásticas, el puesto cimero territorial en el proyecto fútbol inclusivo y el cuarto escaño de ese mismo evento, pero a nivel nacional.
También destacan la primera posición en el concurso de la clase de Educación Física y el de Mejor profesora de Ciego de Ávila, en la edición del 2016.
No trabajo para reconocimientos, pero satisface saber que voy bien y más aún que los alumnos asimilan mis programas educativos, dice Inés María con el rostro emocionado.
La superación profesional de esta mujer, de figura delgada, es una constante, por eso en su haber están los cursos de regla y
arbitraje de hockey sobre piso y gimnasia rítmica, de bádminton y el de Barrio Adentro Deportivo, que recibió en la República Bolivariana de Venezuela en 2014-2015, como colaboradora cubana.
Actualmente Mary cursa una maestría en Ciencias de la Educación, en la que ha podido utilizar sus propias investigaciones relacionadas con las acciones para elevar la motivación de la capacidad física fuerza en escolares con retraso mental leve y en niños con necesidades educativas especiales.
Mientras pueda incrementar mis saberes seguiré, el conocimiento no ocupa espacio, al contrario, hace bien para mantener activa la memoria, ratifica Inés María, quien diseñó una estrategia de capacitación para las conocidas maestras ambulatorias que imparten clases de educación física a los infantes imposibilitados de asistir a una escuela.
La labor que realiza Mary es tan especial como ella, profesora que apuesta por la excelencia en la educación cubana.