Sancti Spíritus, 11 sep (ACN) Pese a los problemas constructivos que impiden su reapertura, el Museo de Arte Colonial, inmueble patrimonial localizado en una de las zonas más antiguas e importantes de esta ciudad, se erige como un espacio imprescindible en la vida cultural de la urbe, gracias al esfuerzo y a la labor de promoción de sus especialistas.
Tras un 2022 en el que lograron avanzar en varios objetos de obra, los elevados costos de la restauración de esta joya arquitectónica, han incidido en que este año no se haya podido ejecutar ninguna acción que frene su deterioro; solo se pintaron algunos sitios específicos, precisó a la ACN Martha Cuéllar, directora de la también conocida como casa de las 100 puertas.
Al referirse a las principales dificultades que tiene hoy el edificio biplanta de valor uno y que data del siglo XVIII, la experta detalló que, aun cuando la cubierta dejó de filtrarse tras desobstruir un bajante de la placa española, esta es un área que sufrió un daño muy grande y de las rasillas “llueve” el barro, lo que atenta contra los objetos que estén debajo.
Además, apuntó que hay señales de una viga partida, la carpintería está en mal estado y el cierre de la edificación que perteneció a la afamada Valle Iznaga ha traído consigo más humedad en los muros y un mayor deterioro de sus locales.
Ante este panorama, en la bellísima casona colonial que abrió sus puertas como museo el 10 de octubre de 1967 se replantearon los estudios y las investigaciones se volcaron en la promoción, en el conocimiento pleno de las piezas y, sobre todo, en hacer que el resto de la población aprecie los valores que resguarda el inmueble.
En tres improvisados almacenes permanecen abanicos, cuadros, vajillas, mesas; todos los técnicos, significó, estamos realizando fondo, es decir, trabajo museográfico desde la pieza en sí, con todo su historial, y a los grandes muebles que están en salas y que casi no pueden moverse se les aplican diariamente técnicas de conservación.
Cuéllar insistió en que cada espacio de la instalación tiene un responsable, una descripción física de lo que allí se preserva y cómo se va comportando, acciones que permiten un control estricto de todos los objetos.
Pese al cierre de sus puertas y ventanales, el Museo de Arte Colonial se consolida como una de las instituciones culturales esenciales de esta localidad y, en estrecha alianza con escuelas, hogares maternos y de ancianos, centros laborales y Consejos Populares, sigue sumando a un público cada vez más interesado en conocer su patrimonio.
Concursos, peñas, conversatorios, talleres y rutas que atrajeron la mirada de muchos espirituanos en la recién finalizada etapa estival se cuentan entre sus actividades.
Incluso, en sus empeños por seguir cautivando a visitantes nacionales y extranjeros, desarrollaron un estudio para saber a ciencia cierta cómo las personas quieren ver la institución cuando abra, para poder recrear un guion de montaje a tono con las terminologías más contemporáneas, porque hoy se habla mucho del museo interactivo, manifestó Martha Cuéllar.