Artemisa, 25 nov (ACN) Hasta los más pequeños tienen su propio Fidel, ese al que escuchan hablar con voz vibrante; este lunes en Artemisa, en el simposio sobre la vida y obra del Comandante en Jefe, lo pintaron a su manera, mostraron las fotos coleccionadas y escucharon las ponencias de sus profes.
El centro mixto Aniversario 50 del Moncada acogió el evento, organizado por la Dirección Municipal de Educación en homenaje al líder de la Revolución cubana, al cumplirse ocho años de su fallecimiento, declaró a la ACN Yanela Reina Jiménez, metodóloga de Bibliotecas Escolares en la cabecera provincial.
Desde cada institución educativa, los círculos infantiles y el programa Educa a tu Hijo, acudieron maestros y estudiantes con diversos trabajos: investigaciones en torno a los aportes de Fidel, actividades que realizan con los alumnos en las aulas, poemas, dibujos y cuanto los enorgullece haber aprendido sobre alguien tan inmenso, subrayó.
La Escuela Especial Leonardo Licor Carballo tiene razones también especiales para participar, afirmó Duleibis Cuéllar Rodríguez, bibliotecaria del plantel; incluso Gretchen González, de séptimo grado, le escribió una carta titulada Desde el corazón de una niña, donde le agradece por las escuelas para niños con discapacidad intelectual.
A partir del evento en la base, nació un álbum llamado Mi inspiración Fidel, con los mejores trabajos de estudiantes de tercero a séptimo, sostuvo, como otra práctica para inculcar sus ideales y asegurar la continuidad histórica de la Revolución.
Mencionó igualmente la ponencia Fidel y los niños y el álbum cargado de fotos de las diferentes etapas de la vida del Comandante en jefe.
Cuéllar Rodríguez expuso una investigación en la cual defiende que la obra principal del nacido en Birán en 1926 es la Revolución, y por ella ha sido protagonista de las situaciones más difíciles, frente al desembarco mercenario por Playa Girón, el paso de huracanes o los momentos tensos del Período Especial.
Siempre permaneció junto a su pueblo; por eso se ganó el reconocimiento y el cariño de todos, enfatizó, sobre todo de Artemisa, a la cual visitó tantas veces, en sus hospitales y cooperativas, en la termoeléctrica, el central 30 de Noviembre, el Mausoleo, el joven club de computación y electrónica, la escuela primaria Carlos Rodríguez Careaga y la Internacional de Cine y Televisión.