Santiago de Cuba, 13 dic (ACN) En el Consejo Popular Flores, de la ciudad de Santiago de Cuba, aún se perciben las huellas del paso del huracán Melissa en hogares y espacios comunitarios; sin embargo, la solidaridad y el esfuerzo colectivo se hacen visibles en las acciones de reparación y entrega de techos ligeros, que buscan transformar esta realidad y devolver seguridad a las familias afectadas.
Hasta la fecha, se contabilizan mil 98 afectaciones totales de techos en la zona, y brigadas de la Empresa Constructora de Obras de Arquitectura número 57 (ECOA 57) trabajan intensamente en el montaje de las mil tejas asignadas, como parte de un proceso multisectorial que garantiza acompañamiento social y respaldo institucional.
Santiago Girón Romero, presidente de la Zona de Defensa del Consejo Popular Flores, señaló a la ACN que la capacidad movilizadora de los actores comunitarios ha sido clave para avanzar en la recuperación.
Aquí cada vecino aporta lo que puede, desde ayudar a trasladar materiales hasta apoyar en la organización de los trabajos, esa unión es lo que nos permite salir adelante, afirmó.
Por su parte, Francisco Jay Duzac, ejecutor de la brigada de ECOA 57, destacó el compromiso de los trabajadores de la construcción.
No ha sido fácil por las limitaciones técnicas y de recursos, pero hemos mantenido la disciplina y el empeño para cumplir con el montaje de las cubiertas, la meta es que cada familia reciba la atención que merece, aseguró.
La solidaridad también se refleja en historias como la de Rosalín Arrate Pileta, beneficiada con la entrega de un nuevo techo, quien expresó que después de perderlo todo, ver cómo llegan las brigadas y les ayudan a levantar la casa le devuelve esperanza: es un gesto que nunca olvidaremos, significó.
Similar sentimiento compartió Lidia Pileta Puente, otra vecina de la comunidad, quien agradeció el acompañamiento de las instituciones y la organización de los servicios comunales.
En medio de tantas dificultades, saber que no estamos solos nos da fuerzas para seguir adelante, dijo.
Pese a las limitaciones impuestas por el bloqueo, Santiago de Cuba se levanta tras el huracán Melissa, con la fuerza de su pueblo y el respaldo de las instituciones, demostrando que la solidaridad y la unidad son pilares esenciales para enfrentar las adversidades y reconstruir la vida cotidiana.
