La Habana, 7 jun (ACN) El espectáculo “Yo sé que volverás”, que subió a escena este sábado en la Sala Avellaneda del Teatro Nacional, consumó el deseo de todos quienes intervinieron para traer de vuelta a Armando Manzanero (1935-2020) a la isla que tanto amó y le inspiró: Cuba.
Homenajearlo no fue solo recordar al gran compositor, al pianista, al autor de tantas canciones que hoy viven en el alma de millones, dijo a la Agencia Cubana de Noticias el cantante y realizador mexicano Rodrigo de la Cadena, quien además de llevar varios años propiciando el intercambio cultural entre los dos países, compartió la dirección artística de la gala junto a Efraín Sabás.
Cada artista que se subió al escenario lo hizo con gran parte del corazón. Gracias Manzanero, por enseñarnos a amar con palabras que se cantan, agregó emocionado.
Haila María Mompié, quien tuvo la dicha de estar al lado del maestro en proyectos como el disco “Con todo respeto”, comentó que la hermandad entre Cuba y México ha perdurado a través de los años también gracias a su música.
En este escenario se sentía su vibra. Realmente estaba aquí. Escríbase con letras mayúsculas, que viva por siempre la vida y obra de Armando Manzanero, quien dijo que seguiría vivo en forma de mariposa. Me sucedió. En el ensayo del viernes, cuando fui a entonar las primeras notas de la canción que me tocó interpretar, se me posó una pequeña mariposa en el brazo, agregó.
La velada propició que otro clásico, "Nos hizo falta tiempo", llegara a la voz y estilo particular de Vania Borges, quien expresó sentirse muy emocionada.
Fue un placer y honor enormes poder interpretar este precioso tema, muy corto, pero que resume una historia de amor verdadera, comentó la artista al ponderar la oportunidad de poder cantarle a quien considera “nuestro Manzanero”.
La “musicalísima” Beatriz Márquez, Premio Nacional de Música 2015, con un impecable “Contigo Aprendí”, transmitió igualmente la admiración por ese legado, del cual ha bebido desde los inicios de su carrera, incluso en registros fonográficos.
Otro de los artistas del patio, Waldo Mendoza, repitió fórmula romántica con la misma efectividad de siempre al defender “Huele a Peligro”.
Agradezco a las embajadas de Cuba y México por el apoyo a la sabia e inteligente propuesta de Rodrigo de la Cadena, y sobre todo al público cubano. Que se repita la historia, el mundo lo necesita, resaltó el popular artista.
Igualmente, Sergio Farías refirió sentirse muy contento por poder compartir junto a tantos amigos, unidos gracias a Manzanero, de quien cantó “Parece que fue ayer”.
Completaron la representación de la mayor de las Antillas, Karel Bartutis y Alwin Damián, cada uno demostrando que el bolero y la canción tienen continuidad garantizada.
Orquestaciones todas llenas de lirismo y profundo respeto por la obra del inolvidable compositor yucateco, a cargo de Miguel Patterson -a la sazón, director de la Orquesta y Coro de la Radio y la Televisión-, desgranaron una gala colmada de momentos mágicos.
La reconocida cantante mexicana Aranza, quien en 2018 acompañó al autor de “Somos Novios” en su última actuación frente a un mar de pueblo de todas las edades en el Malecón habanero, subió esta vez a la Sala Avellaneda llena de recuerdos y entrega vocal.
Notables las armonías y calidad vocal de los jovencísimos hermanos Miranda (Laura Liliana, Cecilia, Verónica y Héctor Emilio), que hicieron recordar aquellos boleros de victrola en la época dorada de los cuartetos.
Carlos Cuevas, uno de los más recurrentes visitantes del festival Boleros de Oro, así como Alejandra Ávalos y Laura Flores -también reconocidas actrices en tierra azteca-, provocaron múltiples emociones entre el público asistente al teatro.
Orgullo de Yucatán, comprometido con la canción y muy cercano a Manzanero, el maestro Luis Pérez Sabido, demostró maestría con una creación coescrita junto al homenajeado, y que da justamente título al espectáculo: “Yo sé que volverás”.
Mientras que, Marco Morel, virtuoso de la guitarra y productor musical de las primeras figuras, propició otra de esas escenas imborrables dentro de la gala con su versión instrumental de “Esperaré”.
Cada rincón de la Sala Avellaneda vivió una entrega memorable, donde las vivencias personales aupadas por infinidad de canciones, no solo llegaron en forma de recuerdos, sino de agradecimiento indeleble desde lunetas y pasillos colmados.
Los coros del auditorio en cada actuación registrada por Canal Once de México y la Televisión Cubana, no dejaron dudas de que aquí también Manzanero vive.
