La Habana, 21 jun (ACN) El Criadero de Cocodrilos ubicado en el Complejo Boca Guamá, en el corazón de la Ciénaga de Zapata, Matanzas, acoge a miles de ejemplares de esa especie y se considera uno de los mayores atractivos turísticos del país.
Precisamente, en ese lugar, donde los manglares se entrelazan con historias de conservación, un pequeño grupo de hombres dedica riesgosas jornadas a una misión que trasciende el simple cuidado, contribuyendo también a custodiar la belleza de un ecosistema único en el mundo.
Yoandri Morejón Ramil, de 31 años de edad, es uno de los cocodrileros que desde hace dos años, con inteligencia y astucia, labora cada día en esa área protegida, y más allá de lo técnico representa un testimonio del patrimonio vivo fundamental en la defensa del cocodrilo cubano (crocodylus rhombifer en su nombre científico), especie autóctona del Parque Nacional Ciénaga de Zapata.
El joven relató en exclusiva a la Agencia Cubana de Noticias que él proviene de una familia de cocodrileros, siendo el resultado de su abuelo fundador de la instalación y de su padre que arriba ya a 35 años en el oficio, por lo que siempre ha estado vinculado a ese mundo.
Me dedico a lo que es la crianza del cocodrilo cubano, a conservar la especie, explicó.
Destacó que forma parte de su labor la recogida de huevos, los cuales se incuban, se crían hasta que el animal nace y alcanza aproximadamente un metro de estatura, y se libera hacia la Ciénaga.
Junto con cinco colegas más, para un total de seis cocodrileros en el centro, nos encargamos de extraer el nido que generalmente se conforma de 25 y hasta 30 huevos, y también de chapear el corral, argumentó.
Manifestó que se cuidan como si fuesen familia y la única defensa con la que cuentan es una vara de madera para ahuyentar al animal.
El joven aseguró que su familia vela constantemente por su cuidado y el mayor consejo que le ofrecen es el de no tener miedo porque son animales que al sentir esa sensación, atacan, puntualizó .
Como parte de su trabajo, también se dedica a la educación del público, el cual no siempre es el más prudente y suele ser necesario llamar la atención de alguien en momentos determinados.
Historias como la de Yoandri Morejón Ramil, tercera generación de cocodrileros, merecen ser contadas pues no cualquiera decide hacer de este oficio un modo de vida y someterse a una labor tan riesgosa, así se tomen las precauciones necesarias.
El Criadero de Cocodrilos es un lugar de vital importancia para el patrimonio natural de Cuba y fomenta el turismo sostenible desde la interacción con el medio ambiente, el cuidado y conservación de la región, y el disfrute de diversas actividades.
La Ciénaga de Zapata se considera el mayor humedal de Cuba y el Caribe, y el mejor conservado.
Además, es uno de los mayores de América Latina, aprobado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura como Reserva de la biosfera y declarada Sitio Ramsar.
