Matanzas, 19 feb (ACN) Con la realización de conferencias educativas en el ámbito de las tecnologías de la información se iniciaron hoy, en esta ciudad, las jornadas de intercambios que hasta el cercano día 21 sostendrán profesores y estudiantes de la Universidad Tecnológica de Rusia (Mirea) y de la Universidad de Matanzas (UM).
El encuentro entre la delegación de la nación euroasiática y la institución ubicada en el occidente cubano responde al programa de acciones diseñadas como parte de un convenio firmado en noviembre último entre ambos centros, para la colaboración académica e investigativa, en aras de promover el desarrollo de la ciencia.
Las interfaces Cerebro-Computadora, Industria 4.0, inteligencia artificial, aprendizaje electrónico y automático se sumarán a las principales temáticas que hasta el próximo viernes centrarán el debate, explicó José A. Macías Mesa, profesor a cargo de las relaciones con las universidades rusas.
Sergey Romanovich, profesor adjunto del Instituto de Tecnologías de la Información, resaltó durante el diálogo la importancia de búsqueda de puntos de coincidencia para concretar aspectos camino al avance en la informatización, la buena colaboración y el desarrollo de posibles proyectos.
Le otorgamos alta importancia a cada intercambio con nuestra universidad, no solo en el plano académico, sino porque de esa manera demostramos que Cuba no está sola en medio de la compleja situación que enfrenta en la actualidad, comentó María de Lourdes Artola Pimentel, vicerrectora de la UM.
Andrey Konstantinovich, profesor del Instituto de Tecnologías de la Información, agradeció el recibimiento y espacio para socializar con estudiantes y docentes de la carrera de Ingeniería Informática de la UM, e instó a fortalecer el pensamiento crítico y la cooperación entre ambos países, como variable en la enseñanza que contribuya a enriquecer los conocimientos.
La casa de altos estudios de Matanzas, con más de cinco décadas de trayectoria en la formación de profesionales integrales, mantiene convenio con 13 universidades rusas como oportunidad para gestar alianzas entre naciones hermanas que apuestan por el desarrollo permanente de la ciencia.