La Habana, 5 jun (ACN) Los Tigres de Ciego de Ávila fueron recibidos hoy como héroes en su tierra natal, tras conquistar la III Liga Élite del Béisbol Cubano con una barrida inolvidable ante los Leñadores de Las Tunas.
En su recorrido por la cabecera provincial, el rugido de la victoria se sintió en cada calle. Familias enteras salieron coreando los nombres de sus peloteros, en un verdadero desfile de júbilo.
Cientos de avileños, y autoridades del Gobierno y el deporte, se congregaron en las afueras del estadio José Ramón Cepero para agradecer a los suyos una hazaña construida contra todos los pronósticos. Danny Miranda, elegido el mejor director del campeonato, agradeció la fidelidad de la afición, una parte importante en esta historia.
Frederich Cepeda, designado Jugador Más Valioso de la postemporada, fue vitoreado como leyenda viva. Con 13 imparables en 29 turnos, cinco dobles, un jonrón y siete empujadas en la postemporada, volvió a escribir su nombre con letras doradas en la historia del béisbol cubano.
¡Los Tigres rugen en la cima tras nueve años de espera! Danny Miranda, con maestría y confianza en sus muchachos, guió a un equipo que desafió pronósticos para coronarse en la III Liga Élite. El liderazgo de Cepeda fue determinante. Ciego de Ávila, muchas felicidades, posteó el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel, en su cuenta oficial de X.
La victoria final llegó ayer, cuando los Tigres vencieron 6-4 a los tuneros sobre la grama del estadio Julio Antonio Mella, completando así la barrida en cuatro partidos para proclamarse campeones de esta tercera edición del torneo selectivo, como antes lo hicieran Agricultores y Cocodrilos de Matanzas.
Contra viento y marea, los avileños —quienes afrontaron bajas clave desde el inicio del certamen—, dominaron la fase clasificatoria, superaron 4-1 a Industriales en semifinales y sellaron su gesta ante el bicampeón de la Serie Nacional, el elenco tunero.
En el desafío definitivo, Yordanis Samón encendió la chispa ofensiva con doble y sencillo ante Jesús Enrique Pérez, que produjeron las dos primeras anotaciones del juego. Luego, Rodolexis Moreno y Ronaldo Castillo aportaron otras dos carreras con imparables en los capítulos cuarto y sexto, respectivamente, frente al relevista Albert Valladares.
Tailon Sánchez impulsó otra en el séptimo y Dennis Laza, por cuarto día consecutivo, desapareció la pelota en el noveno para cerrar la cuenta de los felinos, que ya saboreaban el campeonato.
Alex Guerra se llevó el crédito de la victoria, con una faena de cinco entradas y un tercio, en las que permitió siete hits y dos carreras sucias. El relevo combinó a Yomil González, afectado por dos errores defensivos, y a Leonardo Moreira, quien cerró con autoridad al retirar a cinco bateadores, incluidos tres por la vía del ponche.
La imagen final fue la de un equipo fundido en abrazos sobre la tierra del «Bosque Encantado», mientras desde las gradas caían los aplausos para el nuevo monarca del béisbol cubano.