La Habana, 18 may (ACN) El espigado lanzador de Industriales, Pavel Hernández, siente hoy que el peso de la responsabilidad acaricia sus hombros. No es una carga que lo abrume, sino más bien una reafirmación de que su camino ha sido el correcto.
Después de años de constancia y evolución, el diestro se prepara para abrir el primer partido del duelo semifinal de la III Liga Élite del Béisbol Cubano ante los Tigres de Ciego de Ávila, en el estadio José Ramón Cepero.
Su mirada se clava en el horizonte mientras repasa mentalmente cada lanzamiento, cada ajuste técnico que lo ha llevado hasta aquí. Me siento listo, me siento preparado, declaró en exclusiva para la Agencia Cubana de Noticias.
Es una gran responsabilidad pero al mismo tiempo es un orgullo y una nuestra de que las cosas han ido mejorando, agregó.
No es una simple declaración de intenciones; es el eco de incontables horas de trabajo, de noches de insomnio imaginando el momento en que el béisbol, una vez más, lo pondría en el centro de la escena.
Pavel no es el mismo que alguna vez salió al terreno con la incertidumbre de la juventud. Ahora, tras su paso por las ligas de verano de México y Venezuela y la de invierno de Nicaragua, y la experiencia de representar a Cuba en el último Premier 12, asegura que el cambio ha sido notable.
Creo que el salto se debe a la constancia. Son varios años trabajando ininterrumpidamente, mejorando en cada aspecto del juego, confesó.
En esta temporada aportó cinco triunfos y tuvo una efectividad de 2.09 carreras limpias, segundo en ambos departamentos. Además fue el máximo ponchador (42), exhibió el mejor promedio de embasados con apenas 1.03 por entrada, un average de bateo de rival de solo .195. y otorgó 2.96 bases por bolas por juego completo.
El derecho ha sido uno de los pilares del staff de los Leones, equipo que cerró en la cuarta posición durante la etapa clasificatoria, logrando así el boleto para enfrentar a Ciego de Ávila en esta serie semifinal al mejor de siete partidos.
Es monumental el desafío para este serpentinero de 28 años de edad, sobre todo porque los Tigres concluyeron en la cúspide, con una solidez que dejó atrás cualquier expectativa inicial, y andan mostrando su cartel de favoritos.
El encargado de enfrentarlo en el montículo contrario será Ariel Zerquera, el zurdo refuerzo de Sancti Spíritus que encabezó el listado de victorias del torneo con siete y concluyó con un promedio de carreras limpias de 2.88, tercero en la liga.
Para Pavel no es un partido más. Lanzar contra Ciego de Ávila, su tierra natal, siempre tiene una carga emocional particular. Acepta que la situación puede ser incómoda, sobre todo por los comentarios que surgen cuando te enfrentas a tus raíces.
Cuando uno está enfocado y tiene la mentalidad fuerte no piensa nada más en ese momento que hacerlo lo mejor posible y darle esa posibilidad a Industriales que es el equipo que me ayudó, me dio la oportunidad de llegar a la Serie Nacional y de desarrollar mi talento, dijo con firmeza.
Mi compromiso es con Industriales. Daré lo mejor que tengo y trataré de hacer un buen trabajo para darle la victoria, añadió.
Cuando el próximo martes el Cepero se llene de expectativas, la historia estará escrita en cada lanzamiento, en cada intento de dominar una ofensiva rival que no dará tregua.
Para Pavel Hernández esta es la culminación de un largo viaje hacia la madurez deportiva, un viaje que, espera, tenga su recompensa en el clamor triunfal de su equipo. ¡Nos vemos en el estadio!